La hidrocefalia en bebés es un trastorno en el que se acumula líquido cefalorraquídeo (LCR) en la cavidad craneal. Específicamente en el sistema ventricular, puede presentarse a cualquier edad. Normalmente el LCR se produce en unas cavidades dentro del cerebro (ventrículos) y sirve para suavizar y amortiguar lo movimientos del cerebro. Circula por una serie de conductos hasta los espacios subaracnoideos que rodean el cerebro y la médula espinal, donde se reabsorbe.
La hidrocefalia en bebés se presenta cuando hay aumento en la producción de LCR, bloqueo en la circulación de este o alteración en la absorción de este.
En la edad pediátrica hay algunos factores de riesgo relacionados al desarrollo de hidrocefalia, entre los que se pueden mencionar la etapa prematura. En niños con menos de 1500 gramos al nacer tienen alto riesgo de presentar hemorragia dentro de los ventrículos.
Otras causas de presencia de hidrocefalia en bebés son
- Los tumores que se presentan en la línea media de la cavidad craneal, como son craneofaringiomas que deforman el tercer ventrículo, o tumores en la fosa posterior que obstruyen la circulación de LCR a nivel del cuarto ventrículo.
- Otras causas menos comunes son aquellas que se pueden desarrollar durante el embarazo y se asocian generalmente a malformaciones del sistema nervioso central, que causan obstrucción en la circulación del LCR, y pueden tener un pronóstico mas sombrío
Como podemos ver las causas de la hidrocefalia son múltiples, pueden variar de una edad a otra, lo que tienen en común son las manifestaciones clínicas, que están dadas por el aumento de la presión intracraneal.
Niños menores de dos años Macrocefalia (aumento desproporcionado del perímetro cefálico)
- Desproporción craneofacial, frente prominente.
- Fontanela abombada o tensa Diástasis de suturas (separación de los huesos del cráneo), venas pericraneales dilatadas (venas evidentes en la región craneal).
- Ojos en sol poniente (mirada sostenida hacia abajo) por compresión del cerebro medio o diplopía por afectación de nervios craneales (III/VI nervios craneales).
- Irritabilidad/somnolenciaVómitos Retraso psicomotor
Niños mayores de dos años
- Cefalea intensa y sostenida Vómitos Letargia, cambios en la personalidad, pérdida de interés.
- Estrabismo Edema de pila (en la exploración neurológica).
- Espasticidad de extremidades inferiores (músculos tensos y rígidos).
Diagnóstico de este padecimiento
La historia clínica es la base de la sospecha diagnóstica, ante síntomas como los antes señalados, referidos por los papás, datos recabados de la exploración física y neurológica, así como estudios complementarios (ultrasonido transfontanelar en recién nacidos y prematuros) y tomografía de cráneo.
Se puede llegar al diagnóstico de hidrocefalia, con otros estudios de mayor resolución como la resonancia magnética de cráneo. Estos son usados cuando la causa de la hidrocefalia es debido a lesiones estructurales como lo son tumores o malformaciones en el sistema nervioso central. Y una vez teniendo el diagnóstico de los especialistas poder planear la cirugía.
Complicaciones
La hidrocefalia en bebés sin tratamiento puede llegar a ser mortal. El retraso en el tratamiento oportuno conlleva riesgos en el desarrollo neurológico, con déficit y secuelas permanentes, que incluyen retraso psicomotor, alteración de nervios craneales, ceguera entre otras.
Tratamiento para hidrocefalia en bebés
Una vez diagnosticada la hidrocefalia el tratamiento es quirúrgico, la más de las veces se coloca un sistema para derivar el LCR a otra cavidad en el cuerpo donde se reabsorba, las más frecuente es la abdominal, aunque se puede realizar a corazón, pleura, otras. El procedimiento consiste en la colocación de un catéter intracraneal, conectado a una válvula que contiene un reservorio, y esta a su vez a otro catéter que se por debajo de la piel se dirige hasta la cavidad a donde se va a introducir.
También hay que considerar que en caso de lesiones tumorales se deberán tratar estas con la técnica adecuada para lograr la resección de la misma. En caso de ser secundaria a hemorragia en los ventrículos o a infección del sistema nervioso, se realiza un drenaje ventricular externo, que consiste en colocar un catéter en el ventrículo, y este se exterioriza y se coloca a un reservorio estéril, y cuando se resuelva la causa de la hidrocefalia se valora el retiro del drenaje y/o la colocación de un sistema de derivación permanente como previamente se menciona.
Otra opción es la realización de un procedimiento endoscópico, que tiene indicaciones en un determinado grupo de pacientes y puede ser suficiente, sin la necesidad de colocar un sistema de derivación permanente.
Autor: Dr. Fabian de Jesús Severino